Autor: Fernando González Vigil, Director del Centro de Estudios APEC de la Universidad del Pacífico.
El año APEC Perú 2016 acaba de empezar. Durante los doce meses que tomará su realización bajo conducción peruana, será sin duda el acontecimiento de mayor proyección internacional para nuestro país. Ello debido tanto a la trascendencia de los temas prioritarios del año como a la gran complejidad de su organización.
Los cuatro temas prioritarios del año incluyen nada menos que la elaboración colectiva del estudio estratégico para avanzar hacia el establecimiento de un TLC del Asia-Pacífico (FTAAP, por sus siglas en inglés) que profundice la integración económica regional, la formación de capital humano en APEC, la modernización e internacionalización de las MIPYMEs de la región, y la seguridad alimentaria y humana en APEC.
Sobre esos y otros temas que conforman la vasta agenda de APEC versarán unas 160 reuniones en total, programadas a lo largo del año siguiendo una bien articulada secuencia de grupos de trabajo, comités especializados y reuniones de Altos Funcionarios APEC (o SOM, por Senior Officials Meeting). Donde los representantes gubernamentales de las 21 economías miembros de APEC recibirán insumos provistos por representantes empresariales y especialistas de universidades u otras entidades independientes, y acordarán propuestas de acción que serán presentadas a las reuniones ministeriales competentes. Los principales resultados de esa nutrida serie de reuniones, cuya realización se llevará a cabo en distintas ciudades del país, serán finalmente puestos a la consideración del evento cumbre del año: la reunión de Líderes APEC en Lima de noviembre 2016.
Pero tiene mucho sentido que ese enorme esfuerzo organizativo sea desplegado por el Perú nuevamente. Al asumir por segunda vez la presidencia de APEC y la condición de anfitrión de la mayor parte de sus reuniones anuales, el Perú busca consolidar los significativos beneficios propiciados por la vez anterior.
En efecto, la exitosa organización de APEC Perú 2008 brindó el contexto favorable tanto para el establecimiento de TLC bilaterales con las tres principales potencias económicas asiáticas y para el inicio de un notable incremento de inversiones de sus empresas en Perú, como también para la pertenencia del Perú al mayor acuerdo plurilateral transpacífico: el TPP.
No fue una mera coincidencia que el anuncio del cierre de la negociación del TLC Perú- China ocurriera en los días de la Cumbre de Líderes APEC de noviembre 2008. Ambos hitos generaron un efecto dominó que gatilló las posteriores negociaciones del TLC Perú-Corea del Sur y del TLC Perú-Japón. También contribuyeron, junto con la positiva experiencia del TLC con EEUU, a hacer posible la invitación que ese país hizo al Perú para que integre el primer grupo de países participantes en la negociación del TPP.
Esa virtuosa confluencia de señales elocuentes de la importancia transpacífica del Perú, contribuyó al gran aumento de la inversión asiática que ha recibido nuestro país a partir de aquellos años. Al punto que hoy el Perú es el primer destino de la IED coreana en Latinoamérica y, respecto a la IED china en la región, es el primer destino de la dirigida a recursos naturales y el segundo de la total solo superado por Brasil.
Consolidar estos logros implica que el Perú mejore la competitividad de su economía y diversifique sectorialmente su atractivo como lugar de inversión, a fin de dotarse de un sistema productivo y exportador con más valor agregado y mayor potencial de desarrollo sostenido. Para lo cual, nuestro país debe implementar una acertada combinación de reformas internas que fortalezcan las capacidades empresariales e institucionales del país, así como de medidas para aprovechar óptimamente las oportunidades abiertas por sus TLC transpacíficos. Con tales propósitos encajan perfectamente los antes mencionados temas prioritarios de APEC Perú 2016, pues estos cubren tanto el frente interno como el frente externo de la requerida agenda de acción.
De ahí la importancia del “Seminario Académico sobre las Prioridades Nacionales para APEC Perú 2016”, que tuvo lugar el viernes 4 de diciembre como parte de las actividades de lanzamiento de dicho año. Este evento fue organizado conjuntamente por la Dirección APEC del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú (la cual es conducida por el Alto Funcionario APEC –o SOM- del Perú) y por la Red Peruana para Estudios del Asia-Pacífico (REDAP). Esta red está conformada por 13 de las mejores instituciones académicas del país, representadas por sus respectivos centros de estudios APEC o equivalentes, es decir por el CEAUP en el caso de nuestra universidad.
El programa del seminario abarcó los cuatro temas prioritarios ya mencionados. Las sesiones sobre los mismos fueron cada una iniciadas con una presentación a cargo del viceministerio competente, seguida por un panel integrado por especialistas de las distintas universidades integrantes de la REDAP. Quienes, luego de exponer los resultados de sus investigaciones y experiencia profesional en la materia, propusieron acciones para el Perú en el plano interno y como miembro de APEC.
La Universidad del Pacífico se hizo presente en el programa con tres expositores. La profesora Arlette Beltrán, quien en la sesión sobre capital humano intervino sobre “Financiamiento de la Educación Superior en América Latina”. El profesor Oscar Malca, quien expuso sobre “Retos y Estrategias para la Internacionalización de las PYMEs Peruanas en el Mercado del Asia-Pacífico”. Y el autor de esta nota, quien en la sesión sobre integración económica regional habló sobre “El Camino hacia el FTAAP”.
Estas tres exposiciones fueron bien acogidas por un público que dio pié para sinergias de conocimientos y acción conjunta, porque compuesto tripartitamente por miembros de universidades y por representantes empresariales y gubernamentales. Algunos de los cuales están muy interesados en involucrar a los expositores de la UP en proyectos que consoliden los logros aludidos en esta nota.
Pero no sería correcto explayarse aquí sobre los contenidos y las repercusiones de las intervenciones de los colegas Beltrán y Malca. Lo apropiado sería que ellos mismos lo hagan, de la manera y en el momento que juzguen pertinente.